Tras dos años desde su última publicación, Arjen A. Lucassen regresa con un nuevo trabajo bajo el brazo. Esta vez no se trata de una continuación de “The Theory of Everything” bajo el nombre de Ayreon, que fue el álbum que publicó en 2013. Ahora, Lucassen puede añadir otro proyecto más a su extensa carrera musical. “The Diary” es el debut de The Gentle Storm, que cuenta con Anneke van Giersbergen, vocalista que ostenta el papel principal y dirige los temas con un perfecto equilibrio entre emotividad y técnica. Si tuviéramos que definir el sonido que acompaña a “The Diary”, afirmaríamos que se asemeja a Ambeon. Obviamente, salvando las distancias. Lo que es cierto es que la vocalista Astrid van der Veen elevó a “Fate of a Dreamer” (2001) a un nivel superior, con una magnífica simbiosis entre la música celta y el rock progresivo. Anneke van Giersbergen desempeña la función que otrora hiciera van der Veen, convirtiéndose en el papel primordial sobre el que recae todo el peso de la obra.
“The Diary” muestra una mayor elaboración instrumental que “Fate of a Dreamer”; la música es más compleja, los temas mejor preparados. Quizá sea por la multitud de instrumentos exóticos en “The Diary”, pero se desarrolla mucho la vertiente folk, como ya se experimentó en “The Theory of Everything” y otros trabajos anteriores de Lucassen. No obstante la pericia que ya ha demostrado el multi–instrumentista para crear canciones de rock espacial, esta no se manifiesta en “The Diary” ya que no se explora este recurso en absoluto.
El concepto del trabajo gira en torno a la Edad de Oro holandesa (siglo XVII) y de dos amantes que únicamente pueden comunicarse por cartas. “The Diary” se divide en dos álbumes. Ambos presentan los mismos temas, aunque el primero contiene la “versión Gentle” más acústica y ambiental, y el segundo, la “versión Storm”, más recomendada para los amantes del sonido más heavy y sinfónico. Así, en ambos tipos de grabación, “Endless Sea” abre el camino. Los primeros dos vídeos que se publicaron son de “Endless Sea”, que representan a una mujer hablando de su amado, al que han reclutado para ir en barco, con quien mantiene una comunicación en forma epistolar mientras ella espera en tierra y espera verle de nuevo. En la “versión Storm” aparece un coro que brinda sinfonismo a la obra, cantando al unísono una frase en holandés (“Ras an boord, Trossen los!”), mientras que en el disco acústico emergen otros instrumentos, tales como el cuerno francés o el piano, y se puede comprobar mejor la inmaculada labor de Anneke.
“Heart of Amsterdam” es el eslabón más débil de este debut, con una melodía ingenua y optimista, que puede recordar a “Come Back To Me” (Ayreon, "The Human Equation", 2004), e igualmente intenta relajar al oyente, pero que a diferencia de ésta, la primera no consigue del todo lo que pretende. “The Greatest Love” continúa en la estela de “Endless Sea”, aunque con un mayor toque clasicista, principalmente en la versión acústica del primer disco. “Shores of India” es una delicia auditiva, si bien es verdad que no encaja con ninguna de las piezas que conforman el debut y tampoco se ajusta al concepto global del álbum. Fiel a su título, “Shores of India” se explaya con sonidos insólitos y orientales en los que se codean la dulzura y el ritmo.
“Cape of Storms” es una canción de tintes oscuros que contrasta con la armonía vocal de van Giersbergen. “The Momen” sigue en esa línea, aunque con mayor riqueza instrumental y compositiva que secundan de manera formidable a la voz. En los últimos dos minutos los roles se invierten y finaliza con una sección de violín, instrumentos de viento y dulcimer. “The Storm” es la canción más rockera de todas, similar al trabajo de la vocalista en The Gathering. Ningún tema de los presentados es rotundamente malo, por lo que tampoco iba a serlo “Eyes of Michiel”, con un regusto a Stream of Passion en Embrace the Storm (2005). “Brightest Light” no ofrece ninguna luz nueva bajo el horizonte. El penúltimo tema, “New Horizons”, tiene una apertura al estilo de Ian Anderson, que luego se sucede por un sonido más agresivo. “Epilogue: The Final Entry” es una mezcla liviana entre “Endless Sea” y “The Moment”, y su función es la de mero epílogo; en sus dos minutos sintetiza el ambiente general del disco, mostrando también el sonido de unas campanadas y de unas olas batiendo el mar.
Consecuentemente con todo lo dicho, “The Diary” merece un reconocimiento. No es una publicación para olvidar, sino que es una notable. Pero ahí se queda, en mi opinión. Desarrolla en demasía los mismos recursos, abusa de la misma fórmula, y por tanto, resulta en ocasiones tedioso. Casi una hora por cada uno de los discos es excesivo. -EVA PLAZA vía Keep The Dream Alive-
The Gentle Storm, The Diary Inside Out Records, 2015
Tercera entrega de esta banda francesa quienes presentan “Deadly Scenes” un álbum conceptual basado en los 7 pecados capitales aunque con canciones llamadas “Ego Fandandgo”, “The Walking Fed” o “I´m a Nerd” no es que se deba tomar el concepto con demasiada solemnidad. Conocidos solo por sus apodos (Rorschach, Niko, S.A.D., Howahkan Ituha, y #) y ocultos siempre tras mascaras (tipo Slipknot) este quinteto toca un metal experimental, de toques progresivos y levemente bizarros en el que al estilo de bandas como la Diablo Swing Orchestra combinan los más variados elementos: coros góspel, riffs death, ritmos bailables, voces guturales, pasajes acústicos, efectos de sonido, dobles bombos…. en fin, pareciera que todo cabe en la música de 6:33 cuyas interpretaciones tienen además altas dosis de teatralidad y, me atrevería a decir, hasta ciertos matices cabaretescos. En general, la mayoría de las piezas de "Deadly Scenes" suenan estructuradas y bien logradas con todos sus componentes embonando perfectamente haciendo que la mezcolanza suene bien; sin embargo, también hay momentos en los que la música suena dispersa, a demasiadas cosas pero sin nada que enganche provocando que de repente uno ya no sepa bien a bien que es lo que está escuchando. 54 minutos de metal avant-garde, divertido, sí, lleno de ideas, también, pero que indudablemente requiere de cierta disposición para escucharlo. -CORANNIEIT-
Quizás sea el disco más esperado del año por la mayor parte de la comunidad progresiva. No es de extrañar teniendo en cuenta que el anterior trabajo de Steven Wilson, “The Raven that Refused to Sing (and other stories)”, fue una obra maestra. Una joya que resistirá sin duda el paso del tiempo.
Como bien ha comentado el artista en diversas ocasiones, no quiere que se etiquete su música, no quiere sucumbir a la presión social y repetir la fórmula que le ha catapultado como uno de los mejores y más reconocidos genios de la música del siglo XXI. Prefiere innovar, decorar su sonido con detalles intrincados con los que dota de solidez a sus obras.
Por eso, “Hand. Cannot. Erase” es otro punto aparte. Es decir, el sello Steven Wilson está indiscutiblemente presente, pero con un enfoque diferente. Ya con el artwork obra de Lasse Holle, se puede hacer una idea de cómo suena este disco. La portada muestra el perfil de una joven rodeada por las sombras y por llamativos trazos de pincel con colores vívidos. Como ya reveló Steven Wilson, es un disco conceptual que relata la historia de una mujer basada en Joyce Carol Vincent, una joven que falleció en su piso londinense sin que se notificara su muerte hasta más de dos años después.
La historia en torno a “Hand. Cannot. Erase” está bien entretejida; la protagonista es una pintora, y el hecho de que el rostro esté cubierto por pintura hace referencia a la voluntad de la mujer por desaparecer. La historia también se apoya en un blog (www.handcannoterase.com) en el que el personaje revela sus pensamientos y deja entrever un mundo interno lleno de dudas y soledad. Lleno de vacío, paradójicamente.
Nada de lo que este artista haga es casual; “Hand. Cannot. Erase” puede presumir de tener una excelente producción, una variedad de estilos que pocos se atreven a conjugar, y, como ya es habitual en Steven Wilson, transmitir sentimientos y conceptos de manera admirable a través de notas musicales. Ya que no puede haber ningún cabo suelto, también me pregunto el significado del título, "No hay mano que pueda borrar". ¿Acaso hace referencia al hecho de que sea una pintora? ¿Quizás se refiere a que pese al final tan dramático, no se puede borrar el paso de la vida? Dejando atrás cuestiones existencialistas, nótese que el título está separado por puntos. ¿Para dar énfasis a las palabras?
“We are a crowd of millions separated by concrete walls.
Every day I watch the same people from the estate at the bus stop, and the same people on the bus on my way to and from work. They never talk to each other or interact in any way that I can see, but they are all part of this crowd. They are as familiar to me as anyone alive, but I have never spoken a word to any of them.”
(Somos una multitud de millones separados por muros definidos. Todos los días veo a la misma gente en la parada del autobús, y la misma gente en el autobús cuando voy y vuelvo del trabajo. Nunca hablan los unos con los otros ni interactúan de ninguna forma, pero son parte de esta multitud. No me resultan familiares a nadie vivo que conozca, y no he hablado ni una sola palabra a ninguno de ellos.)
“First Regret” representa la infancia perdida, dejada atrás. Ahí el porqué del título, el “primer arrepentimiento”. Es una introducción ambiental bastante bien lograda en la que se escucha la lluvia caer, niños jugando. Parece un recuerdo difuso, en el que la protagonista rememora vagamente la inocencia perdida.
"Recently I’ve been haunting myself. A few days ago I woke up some time in the middle of the night, but didn’t open my eyes for a long time, just lay there listening to the rain on the window. (…) I am looking for something or someone. Ghosts of people who were once here.
We are not lonely, because we chose to be alone.
We are not lost, because we chose to disappear".
(Últimamente me he estado atormentando a mí misma. Hace unos días me desperté en algún momento de la noche, pero no abrí los ojos hasta después de un tiempo, únicamente me quedé allí escuchando la lluvia chocar contra la ventana. (…) Estoy buscando algo o a alguien. Fantasmas de personas que una vez estuvieron aquí.
No estamos solos, porque elegimos estarlo
No estamos perdidos, porque preferimos desaparecer).
“Three Years Older” se inicia con un sintetizador que da paso a una versión algo cambiada, aunque evidente, de Rush en “Xanadu” (A Farewell to Kings, 1977). Tras un tramo ambiental, debuta la voz de Wilson. Se desarrolla una melodía sencilla pero envolvente, que continúa los pasos de “Cover Version” (2014), la anterior publicación del artista en la que interpreta conocidas canciones de rock o de pop. En los tres últimos minutos hay un final falso, en el que parece que el tema termina, protagonizado por piano, tranquilos acordes de guitarra y toques de batería. Regresa luego subiendo el ritmo, y la influencia de Rush vuelve a hacerse patente.
"Streets pretty deserted this morning (…) A handwritten letter fluttering amongst the cans, bottles and fast food packaging. The ink has been washed away by the rain in places, and elsewhere parts have been crossed out. A love letter, possibly unrequited. Either it was never sent or the recipient simply threw it away.
I love you but I’m lost…
Hand cannot erase this love".
(Las calles están desiertas esta mañana. (…) Hay una carta escrita a mano entre las latas, botellas y envases de comida rápida. La tinta se ha emborronado en algunos sitios debido a la lluvia, y hay partes tachadas. Una carta de amor, quizás no correspondido. O puede que nunca fuera enviada o que el destinatario la tirara.
Te quiero pero estoy perdido…
No hay mano que pueda borrar este amor).
“Hand. Cannot. Erase” continúa precisamente con este mensaje narrado por la mujer en su blog. Fue el primero de los temas que se conocieron del disco, y es la pieza más romántica del nuevo trabajo. Es posible que la protagonista se acordara de su pareja a raíz de esta carta, ya que en el blog comenta que tuvo una hace muchos años. Presenta una base electrónica que acompaña a la canción durante todo el tiempo, con un trasfondo de No-man.
"When I was 13 I had a sister for 6 months. She arrived one February morning, pale and shellshocked, from past lives I could not imagine. She was 3 years older than me, but in no time we became friends.
Later that year my parents separated and my sister was rehoused with a family in Dollis Hill. For a month I wanted to die and missed her every day. But gradually she passed into another distant part of my memory.
Until I could no longer remember her face, her voice, even her name".
(Cuando tenía 13 años tuve una hermana durante 6 meses. Llegó una mañana de febrero, pálida y traumatizada de vivencias pasadas que yo no podía ni imaginar. Era 3 años mayor que yo, pero enseguida nos hicimos amigas.(…) A finales de ese año mis padres se separaron, y mi hermana se fue a otra casa de acogida en Dollis Hill. Durante un mes quise morir y la echaba de menos todos los días. Pero poco a poco fue pasando a otra zona distante de mi memoria. Hasta que ya no pude recordar su cara, su voz, ni siquiera su nombre).
“Perfect Life” es el punto de inflexión del disco: a partir de él, se suceden temas más progresivos y complejos. Sin embargo, en esta primera mitad del disco Wilson ha demostrado que es capaz de crear composiciones diversas que hacen de éste un trabajo completo. Según el mismo músico, “Perfect Life” es una de las piezas más melancólicas que conforman esta nueva publicación. Y así es.
A mi juicio, en estas primeras canciones el artista se ha centrado más en lo que transmite que en la música en sí. Ha sido directo, elaborando piezas con un punto de vista melancólico necesario para relatar la historia completa.
“Perfect Life” comienza recordando a “The Raven that Refused to Sing” y parece que en cualquier momento sonará un piano que sigue a esta apertura ambiental e intimista. Pero no. “Perfect Life” prosigue de forma bien distinta: con una base electrónica. Una narradora -la mujer- relata que tenía una hermana. Wilson continúa con el tema, repitiendo “Teníamos. Teníamos la vida perfecta”, con cierto regusto a Tangerine Dream, aunque muestra sólo dos de sus elementos: lo ambiental y lo electrónico. La vertiente sinfónica se desarrolla a partir de aquí.
“Routine” comienza con una sencilla melodía con la voz acompañada de piano, que va adquiriendo celeridad y potencia y tiene el mismo toque onírico de “Drive Home”. Le sigue la voz femenina de Ninet Tayeb. Y a partir de aquí, Wilson se las ingenia creando un entramado sonoro brillante. Tras un breve silencio, retorna el piano, la guitarra y teclado, seguido por un bajo y batería magníficos. Tras un solo de guitarra, viene la voz femenina “keep washing, keep scrubbing”.
En definitiva, como ya se ha mencionado anteriormente, es una canción compleja, que alterna continuamente cambios de ritmo. Tras esto, la voz de Wilson se va apagando y finaliza magistralmente en fade out.
“Home Invasion” simula la banda sonora de una película de intriga. Rápidamente, Minnemann ejecuta su función con maestría y se sucede un torbellino de sonidos. Aproximadamente a los tres minutos, Wilson se presenta con voz distorsionada en una suerte de “Sound of Muzak” de Porcupine Tree (In Absentia, 2002).
Se enlaza con “Regret #9”, que se inicia con un teclado de fantasía con aires de Camel e incluso de Dream Theater en “Home” (Metropolis Pt.2: Scenes from a Memory, 1999). Tras esta soberbia muestra de buen gusto musical, el tema continúa con Guthrie Govan, con un despliegue magnífico y rompedor de guitarra que sigue la estela blues setentera. Finaliza con voces de niños que se oyen a lo lejos, como un eco de la infancia, y no hay forma mejor de acabar esta pieza impresionante.
“Trasience” es un interludio oscuro, con tintes de Blackfield. Es una pieza más que digna, que pese a ello pasa un poco desapercibida al encontrarse entre dos canciones más complejas que integran el disco: “Home Invasion/Regret #9” y “Ancestral”.
“Ancestral” muda continuamente de ritmo. Al principio tiene un carácter electrónico, al estilo de Muse en “Feeling Good” (Origin of Symmetry, 2001). Se suman a la melodía principal el violín y la flauta, que le dan solidez al sonido. Tras un intervalo más pausado, Govan vuelve a la carga con un interesante solo. Ahora Ninet Tayeb es quien canta, creando un ambiente fantasmagórico. Los propios trabajos de Wilson están presentes aquí más que nunca, principalmente Storm Corrosion, aderezado con rock progresivo de la primera hornada.
"A bicycle
A garden wall
A mother’s call
A love is born
And after all the sleep that falls on me".
(Una bicicleta, el muro de un jardín, la llamada de una madre, el nacimiento de un amor. Y después de todo, el sueño que me sucumbe).
“Happy Returns” es sencilla pero cargada de sentimiento. “El tiempo pasa como trenes…”, dedicada al hermano que apenas conoce (en el blog, la joven comenta que tiene un hermano con el que habla esporádicamente). En la forma de composición recuerda a “Trains” de Porcupine Tree, pero con mayor preponderancia de teclado, e igualmente se establece un símil entre los trenes y el paso del tiempo.
"I’d love to tell you why I’ve been busy but that would be a lie, cause the truth is the years just pass like trains away, but they don’t slow down".
(Me gustaría contarte por qué he estado tan ocupado, pero eso sería una mentira. Porque la verdad es que los años pasan como los trenes, pero ellos no aminoran la marcha).
“Ascendant Here On…” es un outro, en el que se escucha la lluvia caer, un autobús que frena al llegar a la parada.
El arte verdadero no es lo que se cuenta, sino cómo se cuenta. El talento se expresa en forma de arte.
¿Es “Hand. Cannot. Erase” la obra cumbre de Steven Wilson? En mi opinión, es un disco perfecto como trabajo en sí. Sin compararlo con “The Raven That Refused to Sing (and other stories)”. Hacen falta unos años para que se pueda calificar objetivamente este trabajo y ver si realmente supone el cénit de la carrera de Wilson.
"Where do you go if you don’t belong anywhere? If I wanted to run away then why come to the city? Because this is the place to hide. This is the place to be invisible. Anyone can be no one here, and I am someone that wants to be no one.
I move from somewhere to everywhere to nowhere. Do you see me?"
¿A dónde vas si no perteneces a ningún sitio? ¿Si quisiera alejarme por qué venir a la ciudad? Éste es el lugar para ser invisible. Cualquiera puede ser nadie, y yo soy alguien que quiere ser nadie.
Voy desde alguna a todas partes, a ninguna parte. ¿Me ves?