A propósito del reciente estreno de la película "The Boat That Rocked", la revista Uncut publico en su edición de Mayo un muy buen articulo sobre la fascinante historia de "Radio London" pionera, junto con "Radio Caroline", de la radio pirata en Inglaterra y en las cuales supuestamente esta inspirada la película. Aquí les dejamos la primera parte (de dos) del artículo traducido al español.
"Cuando los piratas dominaron las olas" (parte 1).
Una brumosa mañana de Noviembre de 1964. El DJ matutino de Radio Caroline (Caroline), Tony Blackburn de 21 años, despertó temprano en su camarote y subió a cubierta. La visión que tuvo fue como una escena de "The Battle Of River Plate" de Powell & Pressburger. La fina bruma marina se despejo lentamente revelando una enorme nave -el doble del tamaño del de Caroline- anclada a una distancia no muy lejana. Repentinamente, 3 millas y media mar adentro en la costa de Essex, Caroline tuvo compañia. El recién llegado era el "MV Galaxy", un ex-limpia minas de la segunda guerra mundial de 780 toneladas. Ahora era el hogar de Radio London (Big L) una estación financiada con dinero norteamericano que daría a Caroline -la estación pirata original del Reino Unido lanzada 7 meses antes- una dura competencia. Radio London tocaría todo el día lo mejor del pop de los 60´s (Beatles, Stones, Who, Kinks) y también daría a conocer a muchas bandas importantes de esa década, notablemente The Byrds, The Animals, The Small Faces, The Move, y Cream. "The Perfumed Garden" (El Jardín Perfumado) un show conducido por John Peel de Marzo a Agosto de 1967 ganaría un dedicada audiencia de radioescuchas nocturnos por su mezcla única de piscodelia, folk, West Coast rock, blues y poesía. A donde quiera que miraras en el "Galaxy" el futuro estaba pasando. "La nave que transformo todo fue Big L", agrega Tony Blackburn, quien se unió a la Big L en 1966. "Todo el mundo recuerda a Caroline como la famosa primera, pero Big L fue la radio moderna como la conocemos hoy". Desde que empezó trasmitir por primera vez (el 23 Diciembre de 1964), Radio London tuvo 2 ventajas sobre su rival Caroline. En primer lugar lanzo los mas divertidos e ingeniosos jingles, hechos en Estados Unidos, que la audiencia del Reino Unido hubiera escuchado jamas; en segundo lugar contaba con Kenny Everett, un recién llegado de 20 años que se convertiría en la sensación de la radio pirata. Everett conducía junto con Dave Cash un programa diario (el surreal "Kenny & Cash Show") que inicio en 1965 y rápidamente disparo los ratings. Otros DJs de Big L eran Ed "Stewpot" Stewart, Tommy Vance y Keith Skues.
"Era una estación muy profesional, basada en el Top 40 de la radio norteamericana", recuerda Skues, ahora un veterano de la radio regional de la BBC. "El barco era mucho mas grande que el de Caroline, así es que podías salir y tomar un baño de sol en la cubierta, lo cual hicimos hasta que alguien nos dijo que moriríamos por la radiación de la antena trasmisora. También nos habían advertido que perderíamos el cabello a los 26". El fenómeno de la radio pirata en los 60´s fue generado por un hoyo (en la ley) y una ingenua interpretación de la ley marítima. Si un barco se encontraba a 3 o más millas de la costa, técnicamente navegaba en aguas internacionales. Una estación de radio trasmitiendo desde ese barco -sin licencia, en una frecuencia robada y sin intenciones de pagar impuestos- era legalmente intocable. El gobierno, la policía, la marina y el departamento de aduanas no tenían jurisdicción. "Habíamos dejado las islas británicas", apunta Blackburn, "oficialmente estábamos camino a Holanda. Solo que nunca llegamos ahí". Uno casi puede escuchar "A Whiter Shade Of Pale" de Procol Harum y visualizar la escena. Tontos DJ vestidos estrafalariamente yendo arriba y abajo sobre las olas del océano, enfrentando vientos de 75 a 88 KM/H, peleando contra ataques de nauseas y desafiando al gobierno de Harold Wilson, todo al mismo tiempo. En el pico de popularidad de la Big L, esos DJ trasmitieron para aproximadamente 12 millones de radioescuchas por semana, quienes mostraron su aprecio enviándoles sacos de correspondencia. Los piratas -héroes, forajidos, celebridades, parias- fueron un tema habitual en el parlamento, para no mencionar el inmenso descontento de la BBC. ¿Pero quien iba a detenerlos? Al final, seria un disparo.
Mediados de 1965. En menos de un año Radio London y Radio Caroline han revolucionado la radio británica. Dándoles tiempo al aire a nuevos grupos, la Big L los puso en su Fab 40 -los piratas habían frenado el dominio de las grandes disqueras y habían hecho a la BBC (que limitaba la trasmisión de pop a solo algunas horas a la semana) verse como un dinosaurio. Keith Skues: "Los piratas empezaron a aparecer por todos lados. Ellos cambiaron completamente la cara de la música de los 60´s". "De repente el cártel fue roto", remarca el ex-pirata Johnnie Walker, quien empezó en Swinging Radio England en 1966, "y un montón de música -como Motown- fue tocada por primera vez". La BBC quizá denuncio a los más excitantes DJ piratas como "gritones de lotería", pero como explica Gary Leeds de The Walker Brothers, fue la BBC la principal razón por la que los piratas tenían que existir. "era un circulo vicioso", dice, "la BBC tenia que tocar tu disco para que llegaras a las listas de popularidad. Pero si no estabas en las listas la BBC no tocaba tu disco". Como pirata, Tony Blackburn tuvo aventuras que ningún jodido presentador "terrestre" de la BBC, como Alan Freeman o Jimmy Savile, podría igualar. Un día Blackburn subió a lo alto del mástil de "Mi Amigo", el barco desde donde trasmitía Radio Caroline, después de que un fuerte viento enredo los cables de la antena trasmisora. En otra ocasión fue remolcado a un lugar seguro cuando "Mi Amigo" encallo en la costa de Essex. Los piratas frecuentemente tenían que trasmitir en aguas atroces mientras era victimas del vértigo. "En el verano era mucho mas agradable", dice Keith Skues, "Pequeños botes recreativos solían venir desde Frinton y la gente nos lanzaba regalos". Los DJ de Radio London compartían el "Galaxy" con una tripulación de marineros alemanes, incluyendo un capitán. Las reglas del capitán -no borracheras, no mujeres, no insubordinación- no eran negociables. Cada DJ tenía permitido tomar 2 botellas de cerveza al día, no más. La comida y los cigarros eran gratis. Los DJ se organizaron en ciclos de 3 semanas. 2 semanas en el barco y una semana de regreso a tierra. Para regresar al barco, tomaban el tren de Londres a Harwich, mostraban sus pasaportes en la aduana y hacían el viaje de 2 horas de regreso al "Galaxy" en pequeñas embarcaciones en las cuales también llevaban las provisiones (leche, agua, etc.), todos los discos nuevos importantes y ocasionalmente a estrellas pop como Marianne Faithfull. The Walker Brothers fueron especialmente agradecidos por el apoyo de Radio London y grabaron promocionales para Kenny Everett y Dave Cash. "¿Lo puedes imaginar?", ríe Cash, "Kenny and Cash on Lon-don-n... con la sorprendente voz de Scott y un eco". Dave Cash: "Sabemos la imagen que Scott representa ahora. Pero entonces era totalmente diferente. Éramos jóvenes y tontos. Tuvimos nuestra foto en Marble Arch y Dave y Kenny andaban rondando por ahí haciendo ruidos groseros" (continuara).
NOTA: Esta es una traducción libre del articulo "When Pirates Ruled The Waves" escrito por David Cavangh y publicado en la revista Uncut. Su traducción y publicación en este sitio es exclusivamente para fines de difusión y no tiene afán de lucro.
Una brumosa mañana de Noviembre de 1964. El DJ matutino de Radio Caroline (Caroline), Tony Blackburn de 21 años, despertó temprano en su camarote y subió a cubierta. La visión que tuvo fue como una escena de "The Battle Of River Plate" de Powell & Pressburger. La fina bruma marina se despejo lentamente revelando una enorme nave -el doble del tamaño del de Caroline- anclada a una distancia no muy lejana. Repentinamente, 3 millas y media mar adentro en la costa de Essex, Caroline tuvo compañia. El recién llegado era el "MV Galaxy", un ex-limpia minas de la segunda guerra mundial de 780 toneladas. Ahora era el hogar de Radio London (Big L) una estación financiada con dinero norteamericano que daría a Caroline -la estación pirata original del Reino Unido lanzada 7 meses antes- una dura competencia. Radio London tocaría todo el día lo mejor del pop de los 60´s (Beatles, Stones, Who, Kinks) y también daría a conocer a muchas bandas importantes de esa década, notablemente The Byrds, The Animals, The Small Faces, The Move, y Cream. "The Perfumed Garden" (El Jardín Perfumado) un show conducido por John Peel de Marzo a Agosto de 1967 ganaría un dedicada audiencia de radioescuchas nocturnos por su mezcla única de piscodelia, folk, West Coast rock, blues y poesía. A donde quiera que miraras en el "Galaxy" el futuro estaba pasando. "La nave que transformo todo fue Big L", agrega Tony Blackburn, quien se unió a la Big L en 1966. "Todo el mundo recuerda a Caroline como la famosa primera, pero Big L fue la radio moderna como la conocemos hoy". Desde que empezó trasmitir por primera vez (el 23 Diciembre de 1964), Radio London tuvo 2 ventajas sobre su rival Caroline. En primer lugar lanzo los mas divertidos e ingeniosos jingles, hechos en Estados Unidos, que la audiencia del Reino Unido hubiera escuchado jamas; en segundo lugar contaba con Kenny Everett, un recién llegado de 20 años que se convertiría en la sensación de la radio pirata. Everett conducía junto con Dave Cash un programa diario (el surreal "Kenny & Cash Show") que inicio en 1965 y rápidamente disparo los ratings. Otros DJs de Big L eran Ed "Stewpot" Stewart, Tommy Vance y Keith Skues.
"Era una estación muy profesional, basada en el Top 40 de la radio norteamericana", recuerda Skues, ahora un veterano de la radio regional de la BBC. "El barco era mucho mas grande que el de Caroline, así es que podías salir y tomar un baño de sol en la cubierta, lo cual hicimos hasta que alguien nos dijo que moriríamos por la radiación de la antena trasmisora. También nos habían advertido que perderíamos el cabello a los 26". El fenómeno de la radio pirata en los 60´s fue generado por un hoyo (en la ley) y una ingenua interpretación de la ley marítima. Si un barco se encontraba a 3 o más millas de la costa, técnicamente navegaba en aguas internacionales. Una estación de radio trasmitiendo desde ese barco -sin licencia, en una frecuencia robada y sin intenciones de pagar impuestos- era legalmente intocable. El gobierno, la policía, la marina y el departamento de aduanas no tenían jurisdicción. "Habíamos dejado las islas británicas", apunta Blackburn, "oficialmente estábamos camino a Holanda. Solo que nunca llegamos ahí". Uno casi puede escuchar "A Whiter Shade Of Pale" de Procol Harum y visualizar la escena. Tontos DJ vestidos estrafalariamente yendo arriba y abajo sobre las olas del océano, enfrentando vientos de 75 a 88 KM/H, peleando contra ataques de nauseas y desafiando al gobierno de Harold Wilson, todo al mismo tiempo. En el pico de popularidad de la Big L, esos DJ trasmitieron para aproximadamente 12 millones de radioescuchas por semana, quienes mostraron su aprecio enviándoles sacos de correspondencia. Los piratas -héroes, forajidos, celebridades, parias- fueron un tema habitual en el parlamento, para no mencionar el inmenso descontento de la BBC. ¿Pero quien iba a detenerlos? Al final, seria un disparo.
Mediados de 1965. En menos de un año Radio London y Radio Caroline han revolucionado la radio británica. Dándoles tiempo al aire a nuevos grupos, la Big L los puso en su Fab 40 -los piratas habían frenado el dominio de las grandes disqueras y habían hecho a la BBC (que limitaba la trasmisión de pop a solo algunas horas a la semana) verse como un dinosaurio. Keith Skues: "Los piratas empezaron a aparecer por todos lados. Ellos cambiaron completamente la cara de la música de los 60´s". "De repente el cártel fue roto", remarca el ex-pirata Johnnie Walker, quien empezó en Swinging Radio England en 1966, "y un montón de música -como Motown- fue tocada por primera vez". La BBC quizá denuncio a los más excitantes DJ piratas como "gritones de lotería", pero como explica Gary Leeds de The Walker Brothers, fue la BBC la principal razón por la que los piratas tenían que existir. "era un circulo vicioso", dice, "la BBC tenia que tocar tu disco para que llegaras a las listas de popularidad. Pero si no estabas en las listas la BBC no tocaba tu disco". Como pirata, Tony Blackburn tuvo aventuras que ningún jodido presentador "terrestre" de la BBC, como Alan Freeman o Jimmy Savile, podría igualar. Un día Blackburn subió a lo alto del mástil de "Mi Amigo", el barco desde donde trasmitía Radio Caroline, después de que un fuerte viento enredo los cables de la antena trasmisora. En otra ocasión fue remolcado a un lugar seguro cuando "Mi Amigo" encallo en la costa de Essex. Los piratas frecuentemente tenían que trasmitir en aguas atroces mientras era victimas del vértigo. "En el verano era mucho mas agradable", dice Keith Skues, "Pequeños botes recreativos solían venir desde Frinton y la gente nos lanzaba regalos". Los DJ de Radio London compartían el "Galaxy" con una tripulación de marineros alemanes, incluyendo un capitán. Las reglas del capitán -no borracheras, no mujeres, no insubordinación- no eran negociables. Cada DJ tenía permitido tomar 2 botellas de cerveza al día, no más. La comida y los cigarros eran gratis. Los DJ se organizaron en ciclos de 3 semanas. 2 semanas en el barco y una semana de regreso a tierra. Para regresar al barco, tomaban el tren de Londres a Harwich, mostraban sus pasaportes en la aduana y hacían el viaje de 2 horas de regreso al "Galaxy" en pequeñas embarcaciones en las cuales también llevaban las provisiones (leche, agua, etc.), todos los discos nuevos importantes y ocasionalmente a estrellas pop como Marianne Faithfull. The Walker Brothers fueron especialmente agradecidos por el apoyo de Radio London y grabaron promocionales para Kenny Everett y Dave Cash. "¿Lo puedes imaginar?", ríe Cash, "Kenny and Cash on Lon-don-n... con la sorprendente voz de Scott y un eco". Dave Cash: "Sabemos la imagen que Scott representa ahora. Pero entonces era totalmente diferente. Éramos jóvenes y tontos. Tuvimos nuestra foto en Marble Arch y Dave y Kenny andaban rondando por ahí haciendo ruidos groseros" (continuara).
NOTA: Esta es una traducción libre del articulo "When Pirates Ruled The Waves" escrito por David Cavangh y publicado en la revista Uncut. Su traducción y publicación en este sitio es exclusivamente para fines de difusión y no tiene afán de lucro.